Por: José de Jesús Marmolejo Zúñiga
"Nosotros no vendemos un producto, vendemos soluciones..."
Así compartía su experiencia el fundador de varias empresas, que había comenzado la primera junto con su maestro.
Al tener que retirarse su impulsor por causa de enfermedad -A mi misma edad- exponía, habló con nosotros, vendió las partes de la empresa que le correspondía y los demás decidieron seguir adelante.
El empresario al que hacemos referencia el día de hoy, impulsaba otro servicio, en este caso en materia de lavado para la industria porcina, pero poco a poco, los clientes le pedían otra cosa. Él escuchó con atención el requerimiento y se abrió a los mismos.
Empezó una nueva rama del negocio que después llegaría a la calefacción para pollitos así como bebederos y vacunas para los mismos. Explicaba orgulloso con dominio de su tema: tu puedes obtener un pollo de 3 kg en 7 semanas. De la misma manera la longitud de las casetas, junto con la cantidad de aves que podrían contener en ellas y la producción en toneladas si todas las variables se cuidaban para alcanzar las curvas proyectadas por los investigadores.
Un buen negocio, muy noble, pero que requiere de mucho trabajo y mucho esfuerzo.
Éstas dos últimas características: trabajo y esfuerzo, las recalcó en otras charlas que tuvimos, como aquella donde mencionó la frase: "-Son ya 30 años, pero ha costado mucho trabajo".
A preguntas concretas, valores: ¿Trabaja para Bachoco? Esos son los grandes: Bachoco y Pilgrims, nosotros trabajamos para algunas empresas satélites de las mismas. Una vez más era apreciable todo el sistema de proveeduría que cualquier empresa grande de algún ramo tiene.
En este caso, la tecnología era holandesa y a veces española, aunque habían comenzado la empresa con tecnología americana -¿Por qué? Fue la pregunta-. "-Porque la tecnología la tienen ellos, son quienes la desarrollan-" Fue la respuesta. En este momento se pudo ver que la visión de Hollywood donde los Estados Unidos están en el desarrollo de absolutamente todo, no es completamente cierta, dependiendo de sus necesidades y características, los diversos países generan desarrollos importantes en los campos del conocimiento. Completé el comentario con que lo mismo pasaba con los invernaderos en Holanda y en Almería.
Conocedor, más adelante hizo el comentario -"¿Has viajado últimamente a EEUU? ¿Tienes visa vigente?"- Te recomiendo ir a Atlanta, todo en el aeropuerto está automatizado, con tu visa saben quién eres, a dónde vas.
Uno de los consejos que más caló hondo fue cuando completó aquello con lo que iniciamos la sesión "no vendemos productos, vendemos soluciones", y complementó "Pero para solucionar debes de conocer, porque si no conoces, te quemas y quedas peor que antes".
Ante un perfil de ventas que llegará hasta Sudamérica, me pregunto "-¿Tienes tu propia empresa, no?"- Y la respuesta fue que sí. Quedamos en que sería un privilegio seguir colaborando.
En la dinámica de modelado con jabón, el expresó "Hice una hormiga", trato de trabajar, de hacer equipo y estar en silencio.
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