José de Jesús Marmolejo Zúñiga
Nacido un 20 de agosto de 1982, en pleno apogeo de la cultura pop y el rock en idioma español, tras sus primeras correrías para estudiar en la ciudad petrolera de Salamanca, obtuvo el grado de Ingeniero en Electrónica y Comunicaciones, en la División de Ingenierías Campus Irapuato-Salamanca (DICIS), lo que antes se conocía como “la FIMEE”.
Justo al término de sus estudios profesionales, mientras impulsaba el primer intento de emprendimiento con una empresa de automatización, se dedicó a impartir clases en el Conalep de Valle de Santiago (cuenta el mito que se iba de aventón y regresaba de lo mismo); a la innovación agraria (cultivó hortalizas exitosamente en invernadero y pudo comerciar desde chile poblano hasta pimiento morrón para exportación); y también al periodismo cultural y deportivo (platica que tuvo que soportar el enésimo y último descenso del Irapuato FC al fútbol cuasi llanero).
En los caminos de la docencia, Jesús Marmolejo tuvo la oportunidad de impartir cátedra también en el Conalep de la industriosa ciudad de Silao, de participar como docente en la Universidad de Guanajuato y los Institutos Tecnológicos de Irapuato-Guanajuato así como de iniciar el Cecyte campus Guanajuato, en plantel prestado pero con alumnos propios; ya como Director de plantel, dio impulso a las actividades académicas y estudiantiles, por ejemplo: los primeros robots que vieron las cañadas guanajuatenses, los intensos combates de tae kwan do sin golpes entre los participantes, las más sentidas declamaciones y piezas de oratoria sin acordeón, etcétera.
En 2014 se integró al Telebachillerato Comunitario de la UVEG, con lo cual posicionó a esta modalidad educativa a la vanguardia nacional por sus logros, entre los cuales se cuenta la certificación en el Padrón de Buena Calidad de 350 planteles (equivalente a cien desveladas y cuatro mil carpetas zip), la primera reunión nacional de los representantes estatales del Telebachillerato Comunitario (nada más memorable que ver cantar en coro a los académicos nacionales por el Callejón del Beso), así como el desarrollo y registro de múltiples sistemas, cursos de un trayecto formativo que generalmente en plataforma virtual, paradójicamente, completaban su pasión por la capacitación docente presencial.
En los estudios de postgrado, relativos a la educación para complementar su formación inicial de ingeniero, ha podido difundir las ideas de los próceres de la educación y el pensamiento de México, en los pasillos y en los salones, gracias a Jesús Marmolejo, se escucha una voz estentórea que expone y actualiza a José Vasconcelos, Jaime Torres Bodet, Octavio Paz y Antonio Caso, pasando por Eva Sámano y Consuelo Zavala.
Con el gusto por la lectura, nació el de la escritura. De forma profesional ya participó como Co-autor de un libro, amenaza con no detener su camino en ese nuevo entusiasmo.
Aunque "está en chino" intentarlo ha logrado la primera certificación del mandarín, espera resultados del también presentado nivel 5 del Japonés, se apasiona por las lenguas romances francés e italiano y disfruta cada vez más del inglés, al que tras años de estudio poco a poco empieza a comprender.
En la actualidad Jesús Marmolejo continúa con varios
proyectos en pro de la educación. Suele acompañar los viajes con la lectura de clásicos, nomás para
irse deleitando antes de decidirse a compartir los conceptos que le apasionan.
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